Gracias bichito

Quería dedicar esta entrada a mi bichito, el ser más maravilloso del mundo y del que tanto estoy aprendiendo, él es un niño alegre, divertido y exigente, tiene las ideas muy claras y sabe como expresarlas. Tengo que decir que su forma de ser me ha ayudado a abrir los ojos y a ver la maternidad de una manera totalmente distinta a como me la había planteado, quizás si fuera un niño más conformista ahora todo sería diferente, no lo sé, pero si sé que el hecho de que no tolerara separarse de mi y tener que aguantar el goteo constante de opiniones ajenas ante esa situación hicieron que me replanteara muchas cosas, porque no podía ser que si los dos necesitábamos estar juntos y lo disfrutábamos estuviéramos tan equivocados como algunos se empeñaban en hacerme creer.

En mi caso pasé de creer que los bebés son capaces de tomarnos el pelo a saber que simplemente intentan comunicarse con nosotros como saben y pueden y que harán todo lo posible para mantener cerca a las personas más importantes en su vida, sus padres.

Cuando te das cuenta de esto empiezas a ver a tu hijo de otra manera, te pones en su lugar, intentas comprender cada sollozo y ver más allá, disfrutas más de él puesto que deja de ser un "enemigo" y dejas de luchar contra él.

La sensación que tengo ahora al ver a otras madres que han elegido otro camino es que las veo más agobiadas, más tensas, a la defensiva, inmersas en una lucha por tener al niño más travieso, cabezota y llorón en vez de al niño más inquieto, intrépido y expresivo, con esto no quiero decir que todo sea un camino de rosas y que viva en el país de la piruleta, pero creo que se disfruta más de cada instante que estás con tu hijo si no luchas con él, si simplemente le acompañas, respetas e intentas no pedirle más de lo que por su edad puede dar, si te quedas con los momentos buenos e intentas mejorar los malos, al fin y al cabo tanto él como yo somos nuevos en esto y ambos debemos aprender a ceder, priorizar... en definitiva a convivir.

3 comentarios:

  1. Tienes mucha razón, hay muchas madres que luchan con sus hijos en vez de acompañarles y disfrutar los momentos, y en la mayoría de los casos simplemente es porque se supone que sería "lo correcto" (a ojos de los demás, claro). Si todos aprendiesen a disfrutar de los peques sin luchas absurdas todo sería más sencillo y gratificante. Claro está que educar a veces es en sí una lucha, pero puede ser muy bonita si es con unión y comprensión.

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  2. Zulema gracias por comentar!
    La verdad es que sí, educar es difícil y muchas veces supone un tira y afloja, eso si me lo habían dicho ;-) jejeje. Una de las claves creo que es como bien dices la comprensión y otra la paciencia.
    Un saludo!

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  3. Se aprende mucho de ellos. Comenzamos a conocerlos a la misma vez que ellos a nosotros. Y aprendemos a ser más pacientes, más comprensivos, a ceder cuando es posible, y no ceder cuando no. Es todo un mundo!

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Me encantará leer vuestros comentarios, gracias!